El 82% de los empleados y empleadas dejaría su puesto de trabajo para irse a una empresa más empática según un estudio de State os Worplace Emphaty de Bussinessolver. ¿Es entonces la empatía laboral un concepto infravalorado en su nivel de importancia?
¿Puedes ser que la empatía laboral sea una aptitud desconocida y muy poderosa? Vamos a ello.
Utilizamos el concepto de empatía muy a menudo en conceptos no laborales y es una aptitud que valoramos a menudo tanto en la familia como en nuestras amistades. Pero quizá el trabajo, con las presiones, la carga de tareas, y el cumplimiento de objetivos nos centra demasiado en nosotros y nosotras mismos.
Para solucionar esto cada vez más empresas apuestan por fomentar una empatía laboral/ empresarial u organizacional, como queráis llamarla.
¿Qué es la empatía?
La empatía es la intención de comprender los sentimientos y emociones, intentando experimentar de forma objetiva y racional lo que siente otro individuo.
La empatía hace que las personas se ayuden entre sí. Está estrechamente relacionada con el altruismo – el amor y preocupación por los demás – y la capacidad de ayudar
La empatía es lo opuesto de antipatía ya que el contacto con la otra persona genera placer, alegría y satisfacción. La empatía es una actitud positiva que permite establecer relaciones saludables, generando una mejor convivencia entre los individuos.
¿Qué beneficios puede tener a nivel laboral?
Sea cuál sea el puesto de la persona la empatía beneficiará la relación con el resto de trabajadores, proveedores y/o clientes ya que mejora la comunicación y las relaciones interpersonales. Como afirma el medio Cepynews “ Las personas empáticas además, debido a esa facilidad de la que disponen para comprender a los demás, tienen una predisposición especial para algunas de las competencias más demandadas últimamente en el mercado laboral: atención al público, capacidad de liderazgo, habilidades de negociación y trabajo en equipo.”
¿Cómo se puede aumentar la empatía laboral?
Darse tiempo para interactuar con los compañeros, no será lo mismo poner en práctica la empatía con Javier, padre de tres hijos que “con el de mantenimiento” conocer más allá del puesto es clave.
Observa y escucha: intenta prestar atención a los detalles, fíjate si alguien tiene mala cara o en cómo les afecta lo que pasa a las personas de tu equipo.
Ayuda y pide ayuda: si ves que alguien tiene una fase de más carga y que está desbordado/a ofrecelé tu ayuda, y si te pasa al revés no dudes en pedir y/o aceptar la ayuda de los demás.
Pero la empatía no solo depende de ti.
Una cultura empresarial que propicie el trabajo en equipo y en buscar objetivos comunes te ayudará a ser capaz de desarrollar esta empatía.
Además un ambiente de trabajo sano ayudará a que se den acciones empáticas, no es lo mismo ser empático en un ambiente sano que en uno hostil,
Si quieres más información sobre la empatía empresarial u otra inquietud no dudes en ponerte en contacto con Healthy Work.