Los profesionales de Recursos Humanos desempeñan un papel fundamental en el bienestar de los equipos. Con habilidades como la asertividad, la empatía y la capacidad de escuchar y observar, son capaces de detectar posibles problemáticas y ofrecer apoyo inicial. Sin embargo, es importante comprender que la intervención clínica no es una de sus responsabilidades y que para eso puede estar el programa de apoyo al empleado.
Aunque el personal de recursos humanos puede ofrecer apoyo inicial, es importante reconocer que la intervención clínica está fuera de su alcance. Aquí es donde entra en juego el Programa de Apoyo al Empleado (PAE). Este programa se encarga de proporcionar recursos y servicios especializados para abordar problemas de salud mental, emocional, y otros problemas de la vida diaria, como podrían ser consultas con un abogado.
Cuando se identifican problemas que requieren atención clínica, la recomendación del PAE se vuelve crucial. Este programa ofrece acceso a profesionales de la salud mental que pueden proporcionar el tratamiento adecuado y el apoyo necesario para los empleados que lo necesitan. Además la época actual, con un aumento del 90% en las bajas por salud mental desde la pandemia el cuidado de la salud mental debe ser un punto clave dentro del planning de RRHH.
Al centrarse en la prevención e intervención temprana, el Programa de Apoyo al Empleado puede ayudar a identificar y abordar los problemas de salud mental antes de que se conviertan en crisis. Además, al ofrecer un entorno de apoyo y recursos accesibles, los empleados se sienten más valorados y comprometidos con su trabajo.
En resumen, si bien RRHH juega un papel importante en la gestión de recursos humanos, la intervención clínica en salud mental es mejor dejada en manos de profesionales especializados. El Programa de Apoyo al Empleado emerge como una solución crucial para garantizar el bienestar mental de los empleados y el éxito a largo plazo de la empresa. ¡Descubre cómo implementarlo en tu organización hoy mismo en este enlace!