Sabemos que a veces no es fácil desconectar totalmente del trabajo. En muchas ocasiones, nos llevamos tareas a casa fuera de nuestro horario habitual e, incluso, en periodos de vacaciones. Atender llamadas o revisar correos electrónicos fuera del trabajo se ha convertido en algo habitual. Tan normalizado es este hábito hoy en día, que existe un debate sobre el derecho a la desconexión digital de los empleados, es decir, el derecho a olvidarnos de nuestras obligaciones laborales en nuestro tiempo libre o de descanso.
Sabemos por numerosas investigaciones (y por nuestra propia experiencia en muchos casos), que la ausencia de desconexión laboral repercute negativamente en la salud física y mental de quienes acostumbran a no romper con la rutina. Al seguir con un ritmo de trabajo sin descanso, lo único que conseguimos es que lleguemos al agotamiento y sea más fácil frustrarnos por no encontrar soluciones rápidas y creativas en nuestro lugar de trabajo. Es decir, las consecuencias de no dejar de pensar en nuestras responsabilidades puede acarrear serios problemas de salud.
Por lo tanto, ¿qué podemos hacer para descansar de verdad durante las vacaciones? A continuación, algunas recomendaciones y medidas para poder disfrutar del tiempo de ocio sin que la sombra del trabajo esté presente:
- Desconecta los aparatos electrónicos. Es decir, apaga el móvil del trabajo y evita revisar el correo electrónico corporativo. Si esto no es posible, limita la conexión. Es decir, acuerda una hora específica a lo largo del día para conectarte y luego vuelve a desconectar.
- Organízate con antelación. También nos va a ayudar dejar todo bien atado, cerrar el máximo número de temas posibles antes de las vacaciones, y comunicar con antelación los días que vamos a estar fuera de la oficina.
- Planifica unas vacaciones donde se cambie de ambiente, no haya tiempos, y se exploren cosas nuevas. Si por el contrario vamos a quedarnos en casa, es importante organizar cosas que hacer porque si nos quedamos mirando la televisión todo el tiempo, lo más probable es que nos aburramos fácilmente y sintamos la necesidad de volver a conectar con el trabajo.
- Se consciente del tiempo que necesitas para desconectar. Normalmente se recomiendan 2 semanas seguidas, pero otras personas necesitan más tiempo. Se consciente de ello a la hora planificar tus vacaciones.
Si aun siguiendo estas recomendaciones, te cuesta desconectar: tranquil@, es normal y es cuestión de aprendizaje y costumbre. Recuerda que el cuerpo, y sobre todo la mente, llegan a estos periodos del año exhaustos, y necesitan un respiro para volver a obtener el máximo rendimiento.
María José Ortega